Cristina, al menos estudiate los nombres
Ayer Cristina dio un lamentable reportaje a Página 12 en el cual defendió a capa y espada los desastres que Moreno y su tropa hacen en el INDEC. Tropa qu Cristina se ve no conoce bien dado que rebautizó a Ana María Edwin y Beatriz Paglieri como "Amelia Erwin y Beatriz Pagliari".
Que quede claro que no me interesa, en aras del destino de mis impuestos, que se revise lo actuado desde que el matón barato de Moreno echó sus garras sobre el INDEC. No, no me interesa porque valoro mucho la reestructuración de deuda que hizo el gobierno de Kirchner, que logró aliviar la carga muchos años insufrible de la deuda, consiguiendo que los impuestos de los argentinos no vayan a parar a los bolsillos de carpinteros y plomeros de otros países. Esperemos que esos recursos vuelvan a los bolsillos de la ciudadanía en forma de servicios y jubilaciones. Eso sería lo ideal desde ya. Por eso digo, no pretendo un mea culpa para atrás, sino más bien un silencio sobre lo pasado y una corrección a futuro, a efectos de minimizar daños. Pero está claro que el gobierno prefiere doblar la apuesta, dado que en palabras de nuestro nuevo golden boy el INDEC le importa a Wall Street, y lo importante es la inflación que se siente en Pavón Street (Martín, como te dijo Ámbito, Pavón es avenida y no una calle).
Ayer Cristina volvió a repetir la explicación más imbécil sobre la manipulación del INDEC que yo haya oido. Para el gobierno había intereses oscuros detrás del IPC dado que a)como hay bonos que ajustan por inflación y b)hay mucha gente del exterior invertida en esos bonos, ergo c) esa gente del exterior tiene interés en que haya mucha inflación para ganar más dinero.
Vamos punto por punto:
a) los bonos ajustables por inflación no los emitió mandrake sino el gobierno de Kirchner (Par y Discount en Pesos que ajustan capital por CER) y el de su gran elector Eduardo Duhalde (Bodenes varios y Bogar 2018)
b) si la gente del exterior (esa a la que Martín Lousteau ningunea y a la que en unos meses va a estar rogándole por unas malditas monedas) compra bonos que ajutan por inflación no es porque tengan una tanga con (Moreno dixit) "esos troskos del INDEC", sino porque efectivamente hay inflación en la Argentina y eso les genera un retorno interesante.
c) el cuento de "por cada punto de inflación la deuda aumenta..." es obviamente cierto. Pero lo que no cuentan es que debido al mamarracho de Moreno la Argentina paga una tasa sustancialmente más alta que el resto de los emergentes al endeudarse (el capo de Roberto Frenkel lo mostró claramente en un artículo dominical no muy lejano en la Platea de Opinión) y que eso le cuesta más al país -en términos de deuda- que lo que se ahorra de pagar por la inflación dibujada (hecho que reconocieron al tribuno funcionarios de esta administración).
Tenía esperanzas de que las cosas cambiaran después del 28/10. No de que nombraran a Blejer o a Nofal, no de que apreciaran el tipo de cambio, no de que llevaran las tasas a las nubes. En todo caso esperaba que lo peor que han hecho en estos cuatro años (en términos de legado no? porque lo que se chorearon en Skanska y demás ya está, pero el legado de falta de credibilidad del INDEC que algunos consideraran nimio, pero yo creo que es importante) dejaran de hacerlo.
Que quede claro que no me interesa, en aras del destino de mis impuestos, que se revise lo actuado desde que el matón barato de Moreno echó sus garras sobre el INDEC. No, no me interesa porque valoro mucho la reestructuración de deuda que hizo el gobierno de Kirchner, que logró aliviar la carga muchos años insufrible de la deuda, consiguiendo que los impuestos de los argentinos no vayan a parar a los bolsillos de carpinteros y plomeros de otros países. Esperemos que esos recursos vuelvan a los bolsillos de la ciudadanía en forma de servicios y jubilaciones. Eso sería lo ideal desde ya. Por eso digo, no pretendo un mea culpa para atrás, sino más bien un silencio sobre lo pasado y una corrección a futuro, a efectos de minimizar daños. Pero está claro que el gobierno prefiere doblar la apuesta, dado que en palabras de nuestro nuevo golden boy el INDEC le importa a Wall Street, y lo importante es la inflación que se siente en Pavón Street (Martín, como te dijo Ámbito, Pavón es avenida y no una calle).
Ayer Cristina volvió a repetir la explicación más imbécil sobre la manipulación del INDEC que yo haya oido. Para el gobierno había intereses oscuros detrás del IPC dado que a)como hay bonos que ajustan por inflación y b)hay mucha gente del exterior invertida en esos bonos, ergo c) esa gente del exterior tiene interés en que haya mucha inflación para ganar más dinero.
Vamos punto por punto:
a) los bonos ajustables por inflación no los emitió mandrake sino el gobierno de Kirchner (Par y Discount en Pesos que ajustan capital por CER) y el de su gran elector Eduardo Duhalde (Bodenes varios y Bogar 2018)
b) si la gente del exterior (esa a la que Martín Lousteau ningunea y a la que en unos meses va a estar rogándole por unas malditas monedas) compra bonos que ajutan por inflación no es porque tengan una tanga con (Moreno dixit) "esos troskos del INDEC", sino porque efectivamente hay inflación en la Argentina y eso les genera un retorno interesante.
c) el cuento de "por cada punto de inflación la deuda aumenta..." es obviamente cierto. Pero lo que no cuentan es que debido al mamarracho de Moreno la Argentina paga una tasa sustancialmente más alta que el resto de los emergentes al endeudarse (el capo de Roberto Frenkel lo mostró claramente en un artículo dominical no muy lejano en la Platea de Opinión) y que eso le cuesta más al país -en términos de deuda- que lo que se ahorra de pagar por la inflación dibujada (hecho que reconocieron al tribuno funcionarios de esta administración).
Tenía esperanzas de que las cosas cambiaran después del 28/10. No de que nombraran a Blejer o a Nofal, no de que apreciaran el tipo de cambio, no de que llevaran las tasas a las nubes. En todo caso esperaba que lo peor que han hecho en estos cuatro años (en términos de legado no? porque lo que se chorearon en Skanska y demás ya está, pero el legado de falta de credibilidad del INDEC que algunos consideraran nimio, pero yo creo que es importante) dejaran de hacerlo.
posted by Zabalita at 10:35 p. m.
2 Comments:
Me sorprende que Mario de Palermo y los demás compañeros de Página no le hayan corregido los errores a CFK antes de publicar la entrevista. Aunque sospecho que lo de Paglieri/Pagliari fue un error del propio diario, al estilo del cambio de "Bignone" por "Mignone" en la entrevista de Fontevecchia a Verbitsky.
Coincido con vos en que el daño que le hicieron al INDEC -voluntaria o involuntariamente- es casi irreparable. Es probable que el organismo no fuera 100% confiable antes de la intervención del gobierno, como afirma CFK, pero la forma en que todo el proceso fue percibido por la opinión pública fue mil veces peor que cualquier cosa que le hayan hecho o dejado de hacer al INDEC. Ahora la gente ha perdido la confianza en las estadísticas oficiales, y esa confianza tardará mucho en volver.
Saludos
Es claro que lo del INDEC es un bochorno como pocos - y en mi opinion personal, dudo mucho que sea algo "involuntario" - pero sobre todo me parece una falta de respeto hacia la inteligancia de la todos los argentinos supuner que somos una manga de palurdos.
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